No sé si empezar por el principio o por el final, si empezar por Erlend saliendo a presentar a Javiera Mena y afirmando que habla mucho porque le encanta escuchar su propia voz o por el mismo Erlend bailando encima de la barra del Vademecwm mientras Eirik se queda solo una y otra vez.
Entre un momento y otro ocurrieron muchas cosas, muchos instantes de belleza y humor, dos voces tan afinadas, y dos personajes tan distintos. Erlend buscando el baño de masas (y las masas bañándole encantadas) y Eirik sonriendo condescendiente hacia su compañero. Y entre canción y canción, reflexiones sobre la pobreza de España con respecto a Portugal, sobre los lugares en los que llueve (se sentían como en casa), sobre la inspiración siendo ir a ver a algún artista y darte cuenta que no es tan bueno, o simplemente jugando a ser gallegos intentando responder a una pregunta con otra. Erlend puede, Eirik no. No es fácil ser gallego.
Y un final en el que nos sentamos en el escenario (a sus pies, por cierto, de Camper) y algunos bailaron y todo. Salí enamorada.
Y oh, nos invitan al Vade, donde van a pinchar y allá vamos bajo la lluvia, felices porque es martes y el lugar está lleno y Erlend pincha a Paul Simon y California dreamin' mientras Eirik habla con la gente. Y Erlend baila y brinca y bebe y el espíritu fan vence y Eirik me pronuncia su apellido impronunciable y el de Erlend pronunciable (Uuuuyyyaaa) y el gran Davide Bertolini da saltos para parecer más alto. Y Erlend pincha sus propias canciones y baila como si de un ídolo suyo se tratase, y me acerco a él que se gira y se desequilibran sus casi 2 metros sobre mí (pero se recupera) y yo lo odio un poquito por ser tan showman y cuando lo perdemos de vista nos lo imaginamos apagándole los cigarrillos a los fumadores que se han colado. Luego baila sobre la barra y pincha Imagine y canta y casi ni abre los ojos y coge la cazadora y huye, y Eirik dice que se van en una hora.
Y una y otra vez pensaba en cómo es injusto que el pobre Eirik se quede solo (no como en las portadas de los discos) y todo el mundo quiera a Erlend. Yo sigo queriendo a Erlend (un poco más incluso aunque me dé rabia), pero he aprendido a querer a Eirik también. Y a Bertolini y al Tobias el violinista de las mil edades.
4.11.09
Music is the flowers of wintertime
9:04 p. m.
By:
Mrs Jones
On: 9:04 p. m.
In: concierto, eirik glambek boe, erlend oye, kings of convenience, sinsal festival
4 comments
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4 tortugas:
Envidia malsana es lo que siento ahora mismo :-)
Por cierto, a mí me cae mejor Eirik ;-)
No te perdonaré que no pongas un tomate en mi cara al subir esa foto.
... y definitivamente, soy fan de Eirik en contraposición :)
A ver si lo entiendo... Eirik es el de rizos y el otro es el guapo oficial que no es guapo pero es fotogénico??
Por cierto, deberías haber puesto la foto con alguno de ellos, Eirik a poder ser, pesase a quien pesase
No has entendido nada!!
El guapo oficial es Eirik.
Pero Erlend tiene más carisma y mil proyectos paralelos por los q es más famoso.
Hoy por hoy todo el mundo prefiere a Erlend pq Eirik es un poco sosito. Pobriño.
Erlend es el de las gafotas.
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